Si te gusta el pastel de zanahoria y el coco no te deja indiferente, estas galletas te van a encantar. Son sencillas de hacer y duran varios días en buen estado, si consigues no acabar con todas de golpe, jaja.
Ingredientes para llenar de galletas una bandeja de horno
- 10g de raíz de jengibre
- 200g de zanahoria
- 50g de aceite de coco
- 60 – 80g de azúcar
- El zumo de medio limón
- Una pizca de canela molida
- Una cucharadita de esencia de vainilla
- 90g de harina de espelta
- 90g de harina de avena
- 1/2 cucharadita de bicarbonato
- Sal
Elaboración
- Pelar y lavar el jengibre y picar con la picadora hasta que quede bien picado.
- Pelar y lavar la zanahoria, añadir a la picadora y picar durante unos segundos hasta que queden trozos pequeñitos.
- Añadir el aceite de coco, el azúcar, el limón, la canela y la esencia de vainilla y mezclar bien (sin picar, si tu picadora no tiene velocidad lenta también se puede hacer manualmente fuera de la picadora).
- Mezclar las harinas con el bicarbonato y la sal y añadir a la mezcla anterior.
- Mezclar cuidadosamente para que todos los ingredientes queden bien integrados sin amasar y sin excederse en tiempo para que las galletas no queden duras con el horneado.
- Sacar la bandeja del horno y poner papel sobre ella. Encender el horno a 180°C por arriba y por abajo.
- ¡Ahora viene el momento pringue! Hacer bolitas de masa con las manos y chafarlas sobre la bandeja del horno para que queden planas dejando espacio entre ellas para que no se peguen las unas a las otras.
- Hornear durante diez minutos, hasta que las galletas estén doradas. Teniendo en cuenta que normalmente se endurecen un poco más al enfriarse.
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